Capturan a Francisco Oropeza, autor de la masacre de cinco hondureños en Texas.

Oropeza era buscado desde el viernes, luego de que le disparara con un rifle de asalto (AR-15) a cinco hondureños.

Luego de cuatro días de incertidumbre sobre el paradero de Francisco Oropeza, el mexicano acusado de matar a cinco hondureños en el estado de Texas, las autoridades confirmaron que fue detenido.

Según una fuente policial que habló con la cadena CNN, el arresto tuvo lugar en el condado de Montgomery, a varios kilómetros de distancia de Cleveland, donde ocurrió la masacre.

En la búsqueda participaban agentes de la Oficina del Sheriff del Condado de San Jacinto, miembros del FBI (Buró Federal de Investigaciones, por sus siglas en inglés) y hasta la policía fronteriza, pues se temía que el sujeto hubiese huido a otros estados o a México.

Las autoridades del FBI en Houston y el sheriff del condado de San Jacinto, Greg Capers, anunciaron una conferencia de prensa a las 9:00 p.m (hora local) para revelar los detalles de la importante captura, que sacó de circulación al temido tirador, quien se conoció que podría tener entrenamiento militar.

En las últimas horas también se supo que Oropeza de 38 años, había sido deportado cuatro veces hacia Mexico.

Fue una Incansable búsqueda

Desde la noche que sucedió el asesinato, unos 200 policías buscaban al entonces prófugo de la justicia. Se realizó el allanamiento de su casa, donde se hallaron varias armas, y se “peinaron” todas las zonas aledañas a la comunidad, pero el único rastro que dejó fue la ropa que habría usado al momento del ataque, la cual dejó tirada en una zona de difícil acceso para no ser rastreado.

Inicialmente la Oficina del Sheriff ofreció una recompensa de cinco millones de dólares para quien brindara información del fugitivo y con el paso del tiempo y ante la falta de noticias, el FBI también ofreció otros 80 mil dólares.

De momento se desconoce si el individuo fue encontrado gracias al reporte de algún ciudadano, pero trascendió que fue hallado a unos 25 minutos de distancia de la casa de la familia Rivera-Guzmán, donde los esposos e hijos de las víctimas siguen devastados.

En el hecho violento perdieron la vida José Jonathan Cáceres, de 18 años, Diana Velásquez (22), Obdulia Molina Rivera (29), Sonia Argentina Guzmán (28) y su hijo Daniel Guzmán (9)

De acuerdo a los relatos de los sobrevivientes, Francisco Oropeza estaba realizando disparos al aire la noche del viernes 28 de abril, por lo que preocupados por su integridad y porque sus hijos no podían conciliar el sueño a causa de las detonaciones, la familia hondureña llamó a la policía para que acudiera a controlar la situación, pero las autoridades no llegaron a tiempo.

Eso orilló a Wilson García esposo de Sonia y padre de Daniel a acercarse a la valla que separaba su casa con la del conflictivo vecino y pedirle que no disparara cerca de su propiedad, pues su bebé de dos meses de nacido intentaba dormir. El asesino se negó y minutos después ingresó a la casa de los hondureños y les disparó.